Un buen libro, un buen lector
Leer es una de las actividades más gratificantes, provechosas y satisfactorias que el ser humano puede experimentar, pero como en muchas otras cosas, no empechamos en categorizar y prejuiciar hasta los aspectos más nobles, como lo es la lectura.
Primeramente, te pediré a ti como lector, lectora de este artículo que elimines de tu mente “bueno y malo” y que te permitas cuestionar tus propios prejuicios sobre la lectura y los lectores, de no hacerlo pecaríamos de ser incongruentes con el objetivo de este escrito que es justo, resignificar a la literatura y a los lectores y lectoras.
Seguramente has escuchado muchas veces, quizás de tus maestros o de algunas personas que debes leer buenos libros, que los jóvenes ya no leen, las novelas juveniles no es lectura, se piensa, aseguran y comparten que un libro, es sólo impreso, que la lectura sólo es de granes autores clásicos, asegurar que el audiolibro no es libro es tan absurdo como decirle a un ciego que la lectura de libros en braille no es lectura porque no están pasando sus ojos por las letras, pero yo te pregunto, ¿Qué es un buen libro? ¿Qué criterios aplauden o hunden a un libro? Y principalmente, ¿Quién decide lo que es bueno o no? ¿Qué pasa cuando alguien lee en pantalla o lee un audiolibro? Surgiendo entonces quien asevera que ese ocioso que osa desperdiciar su tiempo a través de las pantallas no está leyendo. Nos Hemos creído la idea romántica del lector y la literatura, del valor didáctico que debe dejarnos todo libro, y es que, una verdad que aún nos cuesta aceptar a padres y docentes es que no estamos formando lectores, en realidad, solo alfabetizamos a nuestros hijas, hijos y alumnado, a pesar de saber que la lectura es el corazón de todos los procesos educativos y en este tema, vale la pena mencionar la idea de una de mis alumnas, que podría poner sobre la mesa la reflexión sobre el primer acercamiento de nuestros estudiantes a la literatura, ella nos menciona que uno de los primeros libros que se le exigió leer en su etapa adolescente, el cual le pareció difícil de entender por la terminología y la época, fue “El Quijote” y que a palabras de su profesor, es una de las mejores novelas del milenio, así que ella pensó “si eso es lo mejor y para mí fue aburrido y
difícil, ¿Qué le esperaba de los demás libros?, así que en ese momento leer no le brindaba ningún tipo de satisfacción.
No consideraría esta experiencia como aislada, ¿Cuántas veces como docente, padre o madre, has escuchado decir de tus estudiantes, leer me aburre, no me gusta, ya no lo quiero hacer? Te has preguntado tu como guía, ¿Qué prejuicios literarios trasmito a los demás?
Hay prejuicios no sólo respecto al formato en el que decidimos leer, sino respecto al ocio como algo necesariamente malo ya que, infortunadamente, vivimos en una década en la que se ve muy bien vivir ocupados todo el tiempo, mientras que los momentos de introspección y de descanso son rechazados con firmeza.
Leemos y escribimos todos los días por razones utilitarias, para estudiar, trabajar e informarnos de lo indispensable. El reto actual es que transformemos la lectura y la escritura en un medio cotidiano de aprendizaje, de crecimiento intelectual y emocional para al fin descubrir los placeres de la lectura y la escritura.
El lector que busca pasatiempo y recreo y el lector que se interesa por la cultura, son ambos, lectores, dejemos que las juventudes decidan que quieren leer, dejemos que se aventuren solos a la búsqueda de aprendizajes significativos, dejemos que la literatura les exiga más de ellos, que los ponga a prueba y que los perfeccione, dejemos de proyectar nuestros prejuicios y de descalificar a aquel que inicia en este maravilloso mundo de la lectura.
Referencias
Larrañaga, Elisa, & Yubero, Santiago (2005). El hábito lector como actitud. El origen de la categoría de “falsos lectores”. Ocnos: Revista de Estudios sobre Lectura, (1),43-60.[fecha de Consulta 30 de Septiembre de 2021]. ISSN: 1885-446X. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=259120382004
UNESCO (2021). Estrategia de la UNESCO para la alfabetización de jóvenes y adultos (2020-2025). UNESCO https://es.unesco.org/themes/alfabetizacion/estrategia